afirmaba que la cuna de la humanidad se encontraba en la pampa argentina, y a este antepasado del hombre lo llamó Homunculus patagonicus; esta teoría se encuentra totalmente superada.
Propone un aprendizaje significativo y vivencial, y lo define como el proceso que modifica la percepción que los individuos tienen de la realidad, y deriva de la reorganización del yo.