Esparta se había lanzado a la guerra del Peloponeso bajo la bandera de la libertad y de la autonomía de las ciudades, amenazadas por el imperialismo ateniense. Pero, tras haber vencido, haría otro tanto: impuso tributos, gobernantes títeres e incluso guarniciones.

La bandera del antiguo municipio de Esparta ((foto, foto, foto) era de color azul celeste con adornos griegos blancos en los cuatro lados, una representación de la cabeza de la estatua del rey Leónidas y las palabras ΔΗΜΟΣ ΣΠΑΡΤΗΣ.

La bandera más icónica fue la de Atenas, que representaba a la diosa Atenea y su sagrado búho. Las banderas de Esparta y Corinto también presentaban símbolos distintivos, como una letra griega o un tridente.

Ser un espartano es una expresión que se utiliza para referirse a una persona fuerte, valiente y con una gran capacidad de resistencia. Esta frase proviene de la antigua Grecia, específicamente de la ciudad-estado de Esparta, donde se desarrolló una de las culturas más fascinantes de la historia.

Esparta se había lanzado a la Guerra del Peloponeso bajo la bandera de la libertad y de la autonomía de las ciudades, amenazadas por el imperialismo ateniense. Pero, tras haber vencido, hará ella otro tanto: impone tributos, gobernantes títeres e incluso guarniciones.