17 El deseo de los humildes oíste, oh Jehová; Tú dispones su corazón, y haces atento tu oído,

17 El deseo de los humildes oíste, oh Jehová; Tú dispones su corazón, y haces atento tu oído, 18 Para juzgar al huérfano y al oprimido, A fin de que no vuelva más a hacer violencia el hombre de la tierra.

God Sees Me!

El Salmo 10:17 es un versículo que aborda la profunda relación entre Dios y los que sufren, resaltando la atención divina hacia las necesidades y ansias de los oprimidos.

Señor, tú escuchas la oración de los humildes, tú los animas y los atiendes. Señor, tú conoces el anhelo de los desvalidos. Ciertamente escucharás sus clamores y los consolarás. Señor, tú conoces las esperanzas de los indefensos; ciertamente escucharás sus …

Bendice al codicioso, y desprecia a Jehová. No hay Dios en ninguno de sus pensamientos. A todos sus adversarios desprecia. Nunca me alcanzará el infortunio. Debajo de su lengua hay vejación y maldad. En escondrijos mata al inocente. Arrebata al pobre trayéndolo a su red. Y caen en sus fuertes garras muchos desdichados.

Pon tu delicia en el SEÑOR, y El te dará las peticiones de tu corazón. Cumplirá el deseo de los que le temen, también escuchará su clamor y los salvará. Lo que el impío teme vendrá sobre él, y el deseo de los justos será concedido. Cuando estaba en angustia, imploró al SEÑOR su Dios, y se humilló grandemente delante del Dios de sus padres.…

Explicación, estudio y comentario bíblico de Salmo 10:17-18 verso por verso. para juzgar al huérfano y al oprimido, a fin de que el hombre de la tierra no vuelva más a hacer violencia.

El anhelo de los pobres tú lo sientes, Señor; confórtalos y atiéndelos, vengando los derechos del huérfano y del débil, y no siembre más terror el hombre de la tierra. Jehová, Dios de Abraham, de Isaac y de Israel nuestros padres, conserva perpetuamente esta voluntad del corazón de tu pueblo, y encamina su corazón a ti.

Salmo 10:17 El Salterio contiene dos ideas principales: la derrota de los enemigos de Dios, pero el sufrimiento del pueblo de Dios. I. Cuando cantamos los Salmos, triunfamos en el júbilo de la Igles... Comentario completo de John Trapp. Señor, has oído el deseo de los humildes; prepararás su corazón, harás que tu oído oiga. Ver. 17.