6 En mi angustia invoqué a Jehová, Y clamé a mi Dios. Él oyó mi voz desde su templo, Y mi clamor llegó delante de él, a sus oídos.

6 En mi angustia invoqué a Jehová, Y clamé a mi Dios. Él oyó mi voz desde su templo, Y mi clamor llegó delante de él, a sus oídos. 7 La tierra fue conmovida y tembló; Se conmovieron los cimientos de los montes, Y se estremecieron, porque se indignó él. 8 Humo subió de su nariz, Y de su boca fuego consumidor;

Salmos 4:1 Cuando clamo, respóndeme, oh Dios de mi justicia. En la angustia me has aliviado; ten piedad de mí, escucha mi oración. Salmos 11:4 El SEÑOR está en su santo templo, el trono del SEÑOR está en los cielos; sus ojos contemplan, sus párpados examinan a los hijos de los hombres. Salmos 27:4

Psalms 18:6. In my distress I called upon the Lord The great Jehovah, the everlasting I AM, who is the most High in all the earth, and who is able to save, ( Hebrews 5:7) ; and cried unto my God;

Salmo de David, siervo de Jehová, el cual dirigió a Jehová las palabras de este cántico el día que le libró Jehová de mano de todos sus enemigos, y de mano de Saúl. Entonces dijo: 1 Te amo, oh Jehová, fortaleza mía.

El Salmo 18:6 es un versículo que habla sobre la protección y el poder de Dios. En este versículo, el salmista declara: « En mi angustia yo invoqué a Jehová, y clamé a mi Dios; desde su templo oyó mi voz, y mi clamor llegó a sus oídos.

En el Salmo 18, David nos habla acerca de cómo invocó a Jehová en su angustia y recibió respuesta de Dios. En este artículo, exploraremos el significado detrás de este versículo y cómo podemos aplicarlo en nuestra vida cotidiana.

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Salmos 18:6 (RV1960) «En mi angustia invoqué a Jehová, Y clamé a mi Dios. Él oyó mi voz desde su templo, Y mi clamor llegó delante de él, a sus oídos. Otras versiones | | Copiar

Salmo 18:6 es un recordatorio de la importancia de la fe y la oración en la vida del creyente. Al clamar a Dios en angustia, encontramos alivio y la certeza de que nuestras súplicas son escuchadas. Este versículo nos invita a fortalecer nuestra relación con Dios, confiando en Su amor y poder en cada circunstancia de nuestra vida.